Mito #2: Beber mucha agua antes de una prueba dificulta la detección de THC.
Este es menos un mito y más una advertencia: si bien beber agua diluirá su orina y posiblemente hará que el THC sea indetectable, también puede enviar una advertencia a la compañía que lo prueba, pero dependiendo del tipo de prueba, los tiempos de detección pueden jugar un papel en si pasas una prueba de drogas. La mayoría de las pruebas de drogas rastrean los niveles de creatinina, un subproducto del proceso de digestión. Diluir la orina también diluirá la creatinina, lo que puede ser una señal de alerta para la empresa y, a menudo, conduce a pruebas aún más extensas.
Mito # 3: El ejercicio intenso antes de una prueba ayudará a garantizar un resultado aprobado.
Si bien esto puede ser cierto para la persona que fuma de vez en cuando, si es un fumador habitual (y si está leyendo esto, probablemente lo sea), esto solo es útil si tiene algunas semanas antes de la prueba . Cuando tiene un mes para desintoxicarse, dieta y ejercicio pesado definitivamente ayudarán a reducir el tiempo de su prueba de orina, pero para las pruebas sorpresa o para las que tienen menos tiempo, esta idea es solo un mito esperanzador.
Mito # 4: Todas las pruebas de drogas son pruebas de orina.
Las pruebas de orina son las más baratas y fáciles de realizar en cantidades masivas, pero no todas las pruebas de drogas son iguales. Las pruebas capilares son las más difíciles de superar (aunque eso pronto puede estar cambiando gracias a algunos científicos alemanes), ya que pueden detectar consumo de hasta 90 días y son imposibles de engañar, salvo si decides afeitarte la cabeza. Por supuesto, si está solicitando un trabajo que le importa lo suficiente como para someterse a una prueba capilar, probablemente sabrás que tendras que hacer. Las pruebas de saliva son para los afortunados, ya que solo detectan hasta tres días.
Mito #5: Existen remedios caseros que aumentan las posibilidades de pasar.
Si buscas Google probablemente encontrarás métodos locos para pasar tu prueba de drogas usando artículos de despensa: gelatina, jugo de arándano, vitaminas como la niacina y muchos otros. La mayoría de estos métodos provienen de historias personales que anuncian su uso, pero en realidad, lo más probable que te ayuden a pasar al igual que lanzar hechizos mágicos. (¿Puedes olvidar el THC, verdad, J.K. Rowling?!?) Si bien el beneficio podría no ser exactamente cero, estos métodos no son consistentes o lo suficientemente fuertes como para poner alguna esperanza.
Mito #6: El humo de segunda mano puede hacer que falle una prueba de drogas.
Mientras no esté haciendo hotboxing con Smokey the Bear, no hay forma de que inhale suficiente humo de segunda mano para que falle en una prueba de drogas. La inhalación pasiva no aporta suficiente THC al sistema para registrar un resultado positivo, por lo que no es necesario salir de la habitación si alguien prende un porro, pero no se sorprenda si la tentación de fumar lo pone en una situación peligrosa.
Mito # 7: Toda el cannabis permanece en su sistema la misma cantidad de tiempo.
Las pruebas de orina miden los niveles de THC, y diferentes cepas de hierba tienen diferentes cantidades de THC. El registro de cannabis universitario de cuarto año deja su sistema más rápido que el Omega Ultra Kush de un dispensario de Colorado. Si está atrapado con el primero, agradezca a su distribuidor local por su dedicación continua a la mala hierba, que lo ayudará a pasar una prueba de drogas de manera más eficiente. Si tiene este último, agradézcales por mantener su nivel de espacio alto, pero maldiga los niveles de THC necesarios para hacerlo.
